Esta pregunta apareció mientras diseñábamos la tercera edición de nuestro curso para el desarrollo de competencias al analizar problemas y tomar decisiones.
En los programas para la capacitación gerencial empresarial, se sucede con frecuencia que pocos profesionales han estado expuestos a un proceso, metodología o práctica diseñada para desarrollar competencias necesarias al tomar decisiones de calidad.
En la capacitación gerencial, ¿a qué se llama: tomar decisiones de calidad? Este suele ser el proceso mediante el cuál adquirimos habilidades para identificar los problemas correctos, llevar a cabo la decisión de forma sistemática, haciendo el seguimiento necesario para atenuar los impactos indeseables.
¿Cómo reconocemos la calidad de las decisiones en el equipo gerencial, especialmente cuando se trata de la gestión del talento? Varias situaciones nos proporcionan pistas, aquí varias de ellas:
Al contratar
Se recurren a practicas que en ocasiones no son consistentes en la forma de evaluar a cada aspirante y al hacerlo se hace más difícil comparar un perfil contra otro, puesto que lo que se hace es calibrar los propios juicios, midiendo lo acertado que los mismos podrán ser.
Durante la promoción
Aquí la decisión recae en ocasiones sobre prácticas no a tono con las exigencias del actual entorno digital, se decide por la confianza, antigüedad o por el conocimiento experto que se tiene de los procesos de la empresa (al menos de los procesos como allí se realizan), aunque los mismos disten de ser las mejores prácticas.
Durante la evaluación o al decidir los ajustes salariales.
Este es el tipo de decisiones donde las comparaciones se basan en juicios y no en méritos, hechos, datos o cifras para ponderar una de las acciones que mayor impacto “suele tener sobre la retención del talento”, pero no por mucho tiempo porque los que destacan, buscan formas de reconocimientos acordes con la forma en la que son valoradas sus competencias en un mercado laboral con escasez de talentos.
Se requiere entrenar al equipo de Colaboradores
El buen rendimiento apremia, también formar el relevo y más aún cuando son necesarios nuevos supervisores con otras habilidades, pero ¿hay razones para entrenar? sí..
- Al hacerlo es posible que después de entrenarlos renuncien
- Si coordinar el entrenamiento presencial es costoso
- Pero el entrenamiento online, no es algo a lo que puedan estar acostumbrados y por lo tanto lo ¡rechazaran!
Mientras esto ocurre, en la acera de al lado la realidad transcurre de otra manera, pues hay empresas que deciden crecer y no sobrevivir, proporcionando capacitación empresarial, necesaria para adaptarse y/o anticipar los cambios en el mercado y ganar así mejores ingresos.
¿Ante este escenario, por donde comenzar?
Pues por el que tienes más a mano, el cotidiano.
Se requerirá gerenciar con el ejemplo y el modelaje activo para que tu equipo gerencial adquiera mejores prácticas al decidir y hacerlo con calidad.
Algunos ejemplos de cómo se puede modelar la toma de decisiones:
- Reunirse de pie
- Invertir más tiempo en hacer que en tomar la decisión
- Diferenciar los problemas humanos, de los técnicos y los operativos
- Hacer seguimiento a través de herramientas tecnológicas como Trello
- Aprender a reconocer los talentos de los demás y a saber usarlos en equipo
- Documentar lo que se hizo cuando se cerraron buenos negocios.
¿Necesitas detalles de cómo ayudar a tu equipo en la toma de decisiones calidad?
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